En éste segundo Gran Premio las cosas han salido mejor. El tiempo acompañó toda la tirada, no sopló el aire, algunas ráfagas de vez en cuando, pero nada que preocupara, pero hay que decir que el calor fué excesivo, aunque es preferible a la lluvia.
El equipo hizo lo que tenia que hacer, cada arquero individualmente lucho contra sus demonios y algunos de ellos lograron sus objetivos. Carles supero el corte, pero cayó en la primera eliminatoria, dandole mucha guerra a su adversario que alabó su buena actuación. David quedo a cinco puntos del corte, pudo controlar sus nervios y remontó en una buena segunda tanda. Juanjo hizo una buena primera tanda, pero no estuvo tan centrado en la segunda. Luís, por desgracia, hizo dos tandas que en nada se parecen a las que nos tiene acostumbrados en el club y se quedó con un sabor agridulce.
Lo mejor de todo son las sensaciones positivas de esta experiencia y haber conseguido superarnos a nosotros mismos.